Otitis media serosa: causas, síntomas y tratamientos

¿Qué es la otitis media serosa?

La otitis media serosa es una acumulación de líquido en el oído medio que se debe a una infección de las vías respiratorias superiores o a un resfriado. Este líquido generalmente desaparece espontáneamente en un periodo de entre 4 y 6 semanas. Sin embargo, en algunos casos puede permanecer más tiempo y causar una pérdida temporal de la audición o puede infectarse y dar resultado a una otitis media aguda. La falta de síntomas obvios provoca que, a menudo, esta patología no se diagnostique, a menos que evolucione en otitis media aguda.

¿Qué es la otitis?

La otitis es una de las infecciones del oído más extendidas, y se manifiesta principalmente en niños y bebés, pero también en adultos. Se trata de la inflamación aguda o crónica del oído, puede tener un origen viral o bacteriano, y se produce como resultado de una infección de garganta o un resfriado.

Se han identificado diferentes tipos de otitis, entre los que se encuentran los siguientes:

  • Otitis externa: es la inflamación del canal auditivo causada por la acumulación de cerumen o líquido en esta porción del oído.
  • Otitis media: consiste en la inflamación del oído medio y se distingue a su vez entre:
    a)      Otitis media aguda, cuando la infección se produce solo una vez.
    b)     Otitis media recurrente, si la infección reaparece más de tres veces en un año.
  • Otitis media serosa: es una acumulación de líquido detrás del tímpano que, si no se trata inmediatamente, puede afectar a la audición y aumentar el riesgo de otras infecciones; en el caso de la otitis media serosa crónica, el fluido permanece en su lugar durante períodos bastante largos y tiende a repetirse con el tiempo.
  • Otitis interna (o laberintitis): se produce en el oído interno, especialmente a la parte más profunda de los huesos del cráneo, que contiene el órgano del equilibrio y convierte las vibraciones en ruidos.

No es una enfermedad contagiosa, pero los virus y bacterias que la originaron pueden propagarse por el aire o el agua o a través de las herramientas de limpieza que haya utilizado la persona infectada.

Síntomas de la otitis

Los síntomas asociado con la otitis varían entre adultos y niños. En cuanto a los síntomas de la otitis en adultos, se encuentran los siguientes:

  • Sensación de que el oído está “lleno”.
  • Dolor de oído (otalgia) que se manifiesta de forma repentina y continuada.
  • Sensación auditiva amortiguada.
  • Fuga de secreciones del oído (otorrea) (menos frecuente y generalmente asociada con una probable ruptura del tímpano).

En los adultos, donde la infección es generalmente menos frecuente, se identifican grupos de mayor riesgo, como:

  • Sujetos con asma u otras enfermedades respiratorias crónicas.
  • Sujetos con antecedentes familiares de infecciones del oído.
  • Sujetos con anomalías del paladar.
  • Sujetos con sistema inmunitario debilitado.
  • Fumadores y, en particular, los niños que viven con fumadores.

Causas más comunes de la otitis

Las trompas de Eustaquio son pequeñas aberturas que conectan la porción del oído medio con la parte posterior de la garganta; su función es controlar la presión del aire en el tímpano para mantenerla al mismo nivel que la del entorno externo. Sin embargo, hay factores que pueden contribuir a crear un ambiente cálido y húmedo que fomenta la proliferación de bacterias y microorganismos, como los resfriados, la gripe, las alergias y la sinusitis, que bloquean temporalmente el acceso a la garganta y pueden inflamar los tejidos que rodean las trompas.

Hay otras causas que puede producir la infección del oído medio, como:

  • Problemas de adenoides
  • Toxinas ambientales
  • Exposición al humo del tabaco
  • Secreción retronasal
  • Acumulación de cerumen

Prueba de audición gratuita y cerca de casa

¿Quieres volver a escuchar? Reserva una prueba de audición en un centro cercano de forma gratuita y sin compromiso. Deja tus datos para que nos pongamos en contacto contigo y llevemos a cabo una prueba de audición gratuita en tu ciudad.

Los beneficios de EarPros:

  • Más de 1000 centros en toda Italia
  • Audioprotesistas profesionales
  • Consulta gratuita
  • Prueba gratuita del dispositivo durante 30 días

Utiliza un código postal válido.

Utiliza un código postal válido.

Gracias por ponerte en contacto con nosotros

Te llamaremos tan pronto como sea posible para concertar la cita.

Diagnóstico

A través de un instrumento específico, el otoscopio, el médico puede examinar el oído y evaluar si hay inflamaciones del canal auditivo externo, en la membrana timpánica o si hay líquido en el oído medio. El especialista puede requerir además que el paciente realice pruebas diagnósticas, como las siguientes:

  • Timpanometría: examen instrumental que mide la reacción mecánica del tímpano a los cambios en la presión positiva y negativa.
  • Audiometría: examen que evalúa el grado y la capacidad auditiva de la persona.
  • Tomografía axial computarizada (TAC) y resonancia magnética (IRM): son necesarias en los casos en que la infección se ha diseminado a las zonas que rodean el oído.

Tratamientos y remedios para la otitis

Dependiendo de la infección, el médico puede sugerir al paciente diferentes tratamientos. En el caso de que la infección sea de origen bacteriano, se recetan antibióticos, mientras que las infecciones virales suelen resolverse de forma autónoma sin tener que tomar medicación.

En caso de dolor intenso o fiebre, el médico puede recomendar tomar analgésicos sin receta a base de ibuprofeno y paracetamol y, para aliviar la sensación de dolor en los oídos, se recomiendan las compresas calientes.

En el caso específico de la otitis media serosa crónica, el médico puede sugerir que se proceda con un tratamiento llamado miringotomía: se trata de una pequeña incisión en el tímpano en la que se inserta un tubo para drenar el exceso de líquido en la parte posterior de la membrana timpánica. La miringotomía reduce la otalgia y, al mismo tiempo, el riesgo de futuras infecciones del oído.

Remedios caseros para curar la otitis

Si quieres aliviar el dolor de una infección de oído, existen varios remedios caseros que pueden ser útiles. Colocar una compresa tibia sobre el oído afectado puede reducir el dolor y la inflamación. También puedes calentar un poco de aceite de oliva y aplicar unas gotas en el oído para aliviarlo. El ajo, con sus propiedades antimicrobianas, es otra opción; puedes usar aceite de ajo o consumirlo crudo. Inhalar vapor de agua caliente puede ayudar con la congestión y el dolor, y dormir con la cabeza elevada disminuye la presión en el oído. Beber infusiones calientes, como manzanilla o jengibre, también puede proporcionar alivio temporal. No obstante, si la infección persiste o empeora, es importante consultar a un médico.

Lee también

Qué es la otitis del nadador

Después de un largo baño, una inmersión o una ducha, es posible que escuches los sonidos más amortiguados debido a que ha entrado agua en el oído y el agua atascada en el conducto impide que el tímpano se mueva libremente. La sensación podría desaparecer en pocas horas pero, con menos frecuencia, el agua permanece en los oídos durante varios días, causando inflamación.

Para eliminar el agua es recomendable sacudir la cabeza repetidamente o utilizar un pañuelo de papel para insertarlo en el conducto y absorber el agua restante, sin empujar demasiado para no causar lesiones. Si la situación no se resuelve, significa que se ha creado un tapón de cerumen y, por lo tanto, es necesario intervenir con gotas o aerosoles específicos para tratar de disolverlo. 

La otitis en los niños

Los niños son los sujetos más afectados, especialmente por razones anatómicas. En los más pequeños, la trompa de Eustaquio, es decir, el canal que conecta los oídos con las cavidades nasales, es más estrecha, más corta y se encuentra en posición horizontal. Esto facilita el paso de virus y bacterias a la trompa y especialmente al oído medio. En el oído medio, los agentes externos favorecen la producción de pus, que llena la cavidad y presiona sobre la membrana timpánica, generando una sensación de dolor intenso y persistente. 

A menudo, es difícil para los niños explicar la sensación de dolor que experimentan y su localización. Por lo tanto, es aconsejable prestar atención a varias señales, como las siguientes:

  • El niño llora en una posición recostada
  • Fiebre
  • Irritabilidad o inquietud
  • Pérdida de apetito
  • Dificultad para dormir
  • El niño se toca con frecuencia el oído afectado por la infección

En cuanto al tratamiento, en los niños menores de un año se debe administrar un antibiótico recetado por su pediatra. En el caso de que el niño sea mayor, espera unos días para comprobar cómo evoluciona la inflamación.

Para prevenir la otitis en niños, se recomiendan lavados nasales con soluciones fisiológicas y el uso de una almohada alta con el fin de reducir la presión sobre el tímpano.

Concierta una consulta gratuita sobre audífonos